Autora: Cecilia Elizabeth Mosso Lomelí

 

Es bonito ver llover

lluvia con gotas de miel

que se esparcen por la piel

internándose en el ser.

 

Refrescando con placer

cada célula a granel;

siempre viva, siempre fiel

como un nuevo amanecer.

 

Generando buenas vibras

que se diluyen por dentro,

hasta ser el epicentro

del sentir de nuestras fibras.

 

Eliminando las sombras

que surgen de ese encuentro;

generando un reencuentro

al reconocer sus obras.

 

Lluvia limpia, lluvia fresca,

lluvia intensa, lluvia fría;

lluvia que trae armonía

que al espíritu refresca.

 

Eres lluvia la pureza

que hidrata los corazones;

purificas emociones

es por eso tu grandeza.